El
alcohólico es un individuo que padece de una enfermedad para la cual no se
conoce curación alguna -es decir, ninguna curación que les haga posible beber
con moderación por un largo período de tiempo, como puede una persona no
alcohólica. Debido a que es una enfermedad -una compulsión física más una
obsesión mental por la bebida- el alcohólico tiene que aprender a mantenerse
completamente alejado del alcohol para poder llevar una vida normal.
Fundamentalmente,
el alcoholismo es un problema de salud -una enfermedad física y emocional- más
que una cuestión de insuficiente fuerza de voluntad, o debilidad moral.
Algo que
todos los alcohólicos parecen tener en común es que, con el tiempo, su manera
de beber empeora. No existe ninguna evidencia segura de que una persona que
bebía alcohólicamente haya podido volver al moderado beber social por mucho
tiempo. No se puede ser "un poco alcohólico". Ya que la enfermedad
progresa por etapas, algunos alcohólicos manifiestan síntomas extremos más que
otros. No obstante, una vez que cruzan la frontera del alcoholismo, los
bebedores problema no pueden volver atrás.
Causas
El tan sólo tomar de manera regular
y consistente durante un transcurso de tiempo puede ocasionar una sensación de
dependencia y síntomas de supresión durante los períodos de abstinencia; esta
dependencia física, sin embargo, no es la única causa del alcoholismo. Los
estudios con personas que sufren enfermedades crónicas que han tomado
medicamentos contra el dolor por mucho tiempo, han mostrado que una vez la
persona resiste el proceso de
supresión física, a menudo pierde el deseo por las drogas que
estaba tomando. Para que una persona se vuelva alcohólica, por lo general se
deberán tener en cuenta otros factores biológicos, genéticos, culturales y
psicológicos.
La mayoría de los expertos concuerda
en que los de factores más comunes son:
·
Evasión: la bebida se puede usar
como un medio para excluir de la mente problemas desagradables en vez de
hacerles frente.
·
Soledad: la bebida se puede usar
para disminuir el dolor causado por tener pocas amistades, mudanzas frecuentes,
no tener "raíces", separación de los seres queridos, etc..
·
Miedo: la bebida puede darle a las
personas tímidas, inseguras o amenazadas, un falso sentido de confianza en sí
mismos y seguridad.
·
Falta de control emocional: puede
parecer que la bebida alivia los problemas que uno sufre en sus relaciones con
otras personas.
Problemas familiares que pueden
incidir en que una persona se transforme en alcohólico
·
Culpabilidad
·
Vergüenza
·
Rencor
·
Inseguridad
·
Delincuencia
·
Problemas
económicos
·
Maltrato
físico
Efectos
El alcohol produce sobre el organismo
un efecto tóxico directo y un efecto sedante; además, la ingestión excesiva de
alcohol durante periodos prolongados conduce a carencias en la nutrición y
en otras necesidades orgánicas, lo cual complica la situación. Los casos
avanzados requieren hospitalización. Los efectos sobre los principales sistemas del
organismo son acumulativos e incluyen un amplio rango de alteraciones en el
aparato digestivo, entre las que destacan las úlceras de estómago y de duodeno,
la pancreatitis crónica
y la cirrosis hepática, así como lesiones irreversibles en los sistemas
nerviosos central y periférico. Pueden llegar a producirse desmayos,
alucinaciones e intensos temblores, síntomas del síndrome de abstinencia
alcohólica más grave, y el delirium tremens, que puede ser mortal a pesar del
tratamiento adecuado; esto último contrasta con los síndromes de abstinencia
de drogas como
la heroína, que aunque muy aparatosos rara vez son fatales. Se ha demostrado en
fechas recientes que la ingestión de alcohol durante la gestación, incluso en
cantidades moderadas, puede producir daños graves en el feto,
especialmente retraso en el desarrollo físico
y mental; la forma más grave de este retraso, poco frecuente, se llama síndrome
de alcoholismo fetal.
El alcohol se incorpora rápidamente
al torrente sanguíneo. A nivel del Sistema Nervioso Central, provoca depresión de
las funciones de
autocontrol y autocrítica, disminuye la coordinación motriz
y afecta la respiración y
la circulación.
Los efectos crónicos pueden ser:
·
Disminución de las facultades
mentales y obsesión por la ingesta de alcohol
·
Trastornos
en la sexualidad
·
Lesiones orgánicas, como gastritis,
úlceras, pancreatitis aguda y crónica, cirrosis hepática, infertilidad, etc..
Síndrome de abstinencia
Los efectos del síndrome de
abstinencia son:
·
Delirium
tremens:
ü
desorientación
(confusión mental);
ü
hiperactividad;
ü
fiebre;
ü
insomnio;
ü
deshidratación
(sudoración);
ü
taquicardia.
·
Convulsivo:
ü convulsiones
violentas intercaladas con períodos pasivos.
·
Alucinación
alcohólica:
ü
delirium
tremens;
ü alucinaciones
pronunciadas (en especial auditivas);
ü
temor;
ü los
restantes signos del delirium tremens.
·
Estupor y
coma alcohólico:
ü
hábito
alcohólico;
ü
somnolencia.
El tratamiento primario comienza con
el reconocimiento del alcoholismo como un problema que necesita atención específica,
en vez de considerarlo secundario a otro problema subyacente como se hacía
antaño. Se están desarrollando rápidamente residencias especializadas para su
tratamiento y unidades específicas en los hospitales generales y psiquiátricos.
A medida que la sociedad se conciencia de la verdadera naturalezadel
alcoholismo, disminuye su consideración como estigma social, los enfermos y sus
familias lo ocultan menos y el diagnóstico no se retrasa tanto. Los
tratamientos más precoces y mejores están produciendo unas altas y
esperanzadoras tasas de recuperación.
Además de resolver las
complicaciones orgánicas y los cuadros de abstinencia, el tratamiento pasa por
los consejos y entrevistas individualizados
y por las técnicas de
terapia de grupo encaminadas
a conseguir una abstinencia no forzada de alcohol y otras drogas. La
abstinencia es el objetivo deseado,
a pesar de que algunas opiniones muy discutidas manifiestan que es posible
volver a beber con moderación en sociedad sin peligro. La adicción a otras
drogas, sobre todo tranquilizantes y sedantes, es muy peligrosa para los
alcohólicos. El Antabús, fármaco que produce intolerancia
grave al alcohol, se utiliza a veces como adyuvante. Alcohólicos Anónimos,
grupo de apoyo para enfermos sometidos a otros tratamientos, puede servir a
veces para la recuperación sin necesidad de recurrir al tratamiento
psiquiátrico formal.
Alcohólicos anónimos
Alcohólicos anónimos es una
comunidad de hombres y mujeres que comparten su mutua experiencia, fortaleza y
esperanza para resolver su problema común y ayudar a otros a recuperarse del
alcoholismo.
El único requisito para ser miembro
de A.A. es el deseo de dejar la bebida. Para ser miembro de A.A. no se pagan
honorarios ni cuotas; se mantienen con sus propias contribuciones.